Sin dudas, fue una de las voces más acentuadas en la celebración del oficialismo en Cañuelas, ayer a la noche, tras imponerse en las elecciones legislativas provinciales. Gustavo Arrieta, parlamentario del Parlasur, ex intendente y esposo de Marisa Fassi, apuntó contra las decisiones desacertadas del actual Gobierno Nacional.
De arranque, Arrieta agradeció a todos los ciudadanos de las localidades y expresó: “Es un día histórico, porque teníamos que pasar la prueba del ácido de la democracia y por entender que toda esta comunidad abrazó a los vascos, a los españoles, a los italianos, a los paraguayos y que entendió que nada se puede construir con el odio”.
“No se puede hambrear y cagar a palos a los jubilados, no se puede despedir a los trabajadores, no puede ponerse de moda que se cierre un comercio en Cañuelas: no se puede poner de moda ser un hijo de puta. Que no cuenten con nosotros”, exclamó en medio de aplausos.
Después de defender la lucha por las Islas Malvinas, de pedir por la libertad de Cristina Fernández y elogiar a los candidatos, exclamó que “es el momento de decir basta y lo hacemos desde un distrito donde las mujeres hacen política”.
Sobre el final, pidió: “Volvamos a abrazarnos y a entendernos, así tengamos ideas diferentes. Hay que ser humildes y generosos. Este gobierno es muy malo, por eso tenemos que construir un candidato a presidente y acompañar a nuestro gobernador Axel Kicillof”.