Cerca de las 3 de la mañana, mientras dormía, Oliverio Saúl López (87 años) escuchó ruidos en las inmediaciones de su vivienda de la calle Primero de Mayo 155. Según su esposa, Susana Escudero, López saltó de la cama y con su revolver calibre 38 efectuó tiros disuasorios hacia afuera para intimidar a un grupo de aparentemente cinco delincuentes que estaban metiéndose a su terreno.
Desde la banda respondieron con disparos al cuerpo del jubilado, que recibió un solo impacto en la frente, quedando gravemente herido en el interior de su casa. Los ladrones escaparon sin perpetrar el robo y dejando un bolso con herramientas varias y una pistola calibre 45 marca Ruger (Nro. Serie 66017495), según precisiones brindadas por fuentes policiales.
López es propietario de dos locales de la cuadra y vivió toda su vida en esa vivienda del barrio. Esta en estado crítico, peleando por su vida, en el Hospital Regional.
El hecho es caratulado como robo y homicidio en grado de tentativa.