Tras varias semanas de discusiones, la presidenta del Partido Justicialista, Cristina Kirchner, dispuso que se dé de baja el proyecto para que se convoque a elecciones concurrentes en la Provincia de Buenos Aires. El mensaje de la expresidenta es un gesto hacia la idea del gobernador Axel Kicillof que busca descomprimir la tensión interna dentro del peronismo bonaerense, aunque no es una capitulación de su postura sobre cómo habría que enfrentar al mileísmo y el macrismo en los próximos comicios legislativos.
En este sentido, el texto es un largo cuestionamiento al “error político” de la Gobernación de desdoblar las elecciones provinciales de las nacionales “con apenas seis semanas de diferencia entre una y otra”, remarcó la presidenta del PJ nacional.
“Lo mejor para los bonaerenses en general y para el peronismo en particular es votar una sola vez, el 26 de octubre. O sea, elecciones concurrentes tal y como se viene haciendo hace más de 40 años”, insistió.
En su análisis, CFK reafirmó los argumentos con los cuales el sector que le responde puso en tela de juicio la iniciativa de Kicillof. Uno de ellos es el de los “cuantiosos recursos” que se requerirán para dos elecciones, en medio de las “dificultades económicas y de toda índole que está atravesando la sociedad producto de las políticas de (Javier) Milei”.
Por ese motivo, insistió, “es un error provincializar la elección al desdoblarla” y cuestionó la falta de argumentos sobre la conveniencia del desdoblamiento. En este punto se refirió al encuentro del PJ bonaerense de diciembre pasado donde, según dijo, nadie defendió esa iniciativa.
A pesar de ello, anunció que, “como presidenta del PJ nacional y a pesar de seguir creyendo que desdoblar las elecciones en las Provincia de Buenos Aires es un error político (Dios quiera que me equivoque), le he pedido a los presidentes de los bloques legislativos provinciales” que “desistan del proyecto de concurrencia electoral para que los bonaerenses voten una sola vez”.
Y no solo eso, Cristina Kirchner le pidió a su sector “que acompañen, en la parte pertinente, el proyecto de ley del compañero gobernador” que también recibió el apoyo de la UCR, el PRO y La Libertad Avanza (LLA), los tres sectores en apariencia más beneficiados por el desdoblamiento.
La decisión de la exmandataria le dará luz verde a Kicillof para que se cumpla con su propuesta desdobladora que inició un duro debate interno.
Cristina en Cañuelas:
La dos veces presidenta encabezó este sábado un encuentro del bloque Unión por la Patria (UxP) de parlamentarios del Mercosur.
La intendenta de Cañuelas, Marisa Fassi, y el vicepresidente del Parlamento del Mercosur —quien además representa a la Argentina en la Mesa Directiva del organismo—, Gustavo Arrieta, recibieron a la ex mandataria en un establecimiento rural del distrito.
Durante la jornada, Cristina Fernández de Kirchner participó de una reunión de trabajo junto a los integrantes del bloque oficialista del Parlasur. Estuvieron presentes el presidente del bloque, Franco Maximiliano Metaza, y los parlamentarios Raúl Germán Bittel, Karolina Bobadilla, Ana María Corradi, Alejandro Martín Deanes, Victoria Donda, Marina Femenía, Luis Mariano Fernández, María Alejandra Mas, Matías Jorge Carlos Sotomayor y Yesica Anabela Taborda.
También participaron la exministra, exparlamentaria y referente cultural Teresa Parodi; y el secretario de Relaciones Internacionales del Parlasur, Lucas Serna.
Durante el encuentro se debatieron los principales desafíos que enfrenta el Parlamento del Mercosur en el escenario internacional actual, y se delinearon estrategias para profundizar la integración regional con una mirada soberana, democrática y centrada en los intereses de los pueblos latinoamericanos.
Cristina Fernández de Kirchner desarrolló un análisis geopolítico sobre la configuración del nuevo tablero internacional, con especial foco en las relaciones políticas y comerciales entre China y Estados Unidos —tanto entre sí como con el resto del mundo—, el rol estratégico del MERCOSUR como reserva de mercado, y la relevancia creciente del bloque BRICS en la reconfiguración global.
En el plano nacional, abordó la coyuntura argentina haciendo énfasis en los desafíos de la educación, la necesidad de una nueva estatalidad y los cambios estructurales que atraviesa el mundo del trabajo. Subrayó la importancia de repensar el rol del Estado y de consolidar una articulación regional sólida en un contexto marcado por profundas tensiones económicas, sociales y geopolíticas.